Innumerables documentos, artículos de opinión y estudios comienzan afirmando que la actual generación de adolescentes es la mayor de la historia de la humanidad, y sigue creciendo. En 2019, había unos 1.200 millones de adolescentes de entre 15 y 24 años, y se espera que la población adolescente alcance un máximo de casi 1.400 millones en 2065, si mantiene la trayectoria actual. Aunque los retos para un país joven son muchos, también hay oportunidades, siempre que los gobiernos y el sector privado inviertan adecuadamente en la educación, el empleo y la salud de los jóvenes. Los próximos ocho años representan una oportunidad sin precedentes para lograr el cambio transformador necesario para alcanzar tanto los Objetivos de Desarrollo Sostenible como la visión de FP2030. Sin embargo, es poco probable que estos objetivos se alcancen plenamente sin un esfuerzo mucho mayor por satisfacer las necesidades y preferencias sanitarias de los jóvenes de todo el mundo.